Los precios de la hacienda suben en línea con la inflación o más aún, mientras que la carne vacuna aumentó 42% en forma interanual.
La diferencia la absorbió la industria que también sufre la pérdida de ingresos por subproductos.
Los precios de la carne vacuna aumentaron en forma interanual y de acuerdo con los datos que publica el IPCVA 42%, fue la que registró las menores subas ya que el cerdo (pechito) se incrementó 46% y el pollo llamativamente tuvo una suba más que importante lo que da cuenta de su aceptación y penetración en el consumo doméstico. El incremento en este caso fue de 58%.
Mientras los precios de la carne vacuna aumentan mucho menos que la inflación y los de los subproductos siguen en niveles bajos (ya es más que conocido el problema del cuero y sus bajos valores de los que damos cuenta más abajo) los valores de la hacienda tuvieron incrementos muy mayores incluso en un año de alta oferta cada mes.
El novillo tuvo una suba interanual de 57%, el novillito de 56%, la vaquillona de 63% mientras que la vaca, alentada por la fuerte y creciente demanda de China, tuvo un incremento interanual de 70%.
En conclusión, la industria frigorífica (especialmente la que tiene su negocio orientado al consumo) y está absorbiendo resignando ingresos tanto por la menos suba de la carne respecto del incremento de la hacienda que es el mayor costos de las fábricas como por la caída de los subproductos ganaderos.
A continuación va el informe del IPCVA y el cuadro con los cambios en los precios del ganado para faena.