Los precios de la hacienda subieron en el último año 65% y los de la carne 58%. El mostrador da señales de no tener más oxígeno y la cadena industrial y comercial absorben la brecha.
Los precios del ganado para faena se vienen afirmando desde inicios de año y en los últimos 12 meses acumulan una suba del 65% en las categorías que atienden al consumo interno.
Por otra parte, la carne aumentó 58% de acuerdo con las mediciones del IPCVA lo que da cuenta de que el consumidor sigue prefiriendo a la carne vacuna pero que no puede convalidar las subas de la hacienda.
Por eso se ajustan los márgenes en la industria que cuenta con menos mercadería para procesar y costos más altos y también para el eslabón comercial que también sufre la suba de sus costos. Por otra parte, crece la participación del productor en el precio final especialmente del criador como señaló Ignacio Iriarte.
En este contexto y a pesar de las dificultades los frigoríficos mostraron vocación de consenso y convalidaron una pauta salarial de 50% por 10 meses con revisión en marzo y abril del año que viene.