En los últimos 30 años se dio un incremento de la oferta y consumo interno de las tres principales carnes y un cambio en la dieta de los argentinos
El consumo de carnes en la Argentina viene creciendo de la mano del incremento en la oferta de carne porcina y aviar así durante los últimos años se fue modificando el patrón. Si antes la mayor parte del abastecimiento interno estaba en manos del sector vacuno ahora está en la sumatoria de oferta aportada por el sector avícola y el de producción porcina.
El beneficio está en que sumando las 3 cada ciudadano dispone de un volumen de proteína cárnica superior al que había 30 años atrás.
Así se desprende de la estadística oficial que indica que en 2020 el consumo de carnes sumó al menos 111 kilos por habitante y por año mientras que en 1990 el total ascendía a 102 kilos mientras que en el año 2000 y 2010 el nivel fue todavía menor.
En tal sentido en la editorial de este newsletter Daniel Urcía, presidente de Fifra indicó: “El argentino promedio en 2020 aumentó el consumo de carnes, hay que comprender que el argentino del siglo XXI prefiere una dieta diversificada de carnes, el consumo de carne avícola y de carne porcina está instalado no solamente por precios, también lo es por preferencia de los consumidores y por ende, aunque nos pese, el único consumo que va a disminuir es el consumo de carne vacuna”.