La falta de rentabilidad y la escasa oferta reducen el ingreso de hacienda en los corrales y anticipan un escenario de escasez en los próximos meses.
En 2025 los engordes a corral encerraron 5 millones de animales. Eso significó un crecimiento de 10% respecto del 2022 y, a su vez, que la participación de la hacienda terminada en esos establecimientos fue el 35% del total faenado que sumó 14,5 millones de vacunos.
Este incremento se debió a que en años de fuerte sequía. Pero tras un año de mayores ingresos en los últimos meses comenzó a darse el proceso de vaciamiento.
Hay poca invernada, que encima es cara para los engordadores y por eso sale más hacienda de la que entra.
Según datos del Senasa en octubre entraron a los feedlots 282 mil vacunos y salieron 429 mil. En noviembre entraron 362 mil y salieron 418 mil y en diciembre ingresaron 309 mil y salieron 390 mil.
De acuerdo con los datos de la Cámara de Feedlot, la ocupación era de 63%, la reposición en el último mes fue de 0,9 y por cada animal que mandaron a la faena entró menos de 1 y por cada vacuno enviado a la faena se perdieron 55.000 pesos antes de cargar el costo financiero al negocio.