Este año por la seca no hubo recrías y los terneros entraron a los corrales con pesos bajos y salen con kilajes inferiores a los deseados por productores y frigoríficos aportando menos carne a la oferta local.
“Cae la producción de carne vacuna por animal faenado”, así lo indicó la analista del Rosgan María Julia Aiassa quien comentó en su resumen semanal Lote de Noticias lo que el mercado viene planteando: entró más hacienda a los corrales pero como no se hicieron recrías y los costos fueron altos este año el ganado sale liviano y cada novillito o vaquillona aportan menos a la oferta de carne.
“Los datos del mes de julio continúan marcando una brecha significativa en la caída de peso medio por res en gancho. Con 290.120 toneladas de carne obtenidas, el peso medio por res fue de 225,4 kilos, casi 11 kilos menos que los obtenidos en julio del año pasado cuando se registraban promedios 236,3 kilos por res”, dijo Aiassa.
En términos porcentuales, las hembras son las que mayor peso relativo perdieron con un 4,7% de merma mientras que los machos registraron caídas del 3,5% interanual tras alcanzar pesos medio de 205 y 244 kilos, respectivamente, indicó la analista